¿Cuáles son las consecuencias del cambio climático?
Si bien los países ricos y con un rápido crecimiento son los principales consumidores de combustibles fósiles y otros recursos, los efectos del cambio climático, a menudo, se sienten más gravemente en los países pobres, donde muchas personas ya luchan contra la escasez de alimentos y agua, y enfermedades como el cólera, que se propagan con mayor facilidad cuando los desastres naturales, como las inundaciones y las tormentas, comprometen la ya frágil infraestructura sanitaria y de abastecimiento de agua.
El cambio climático repercute en tantos aspectos diferentes de nuestra vida que ha dejado de ser un problema "ambiental" para pasar a ser uno que exige la experiencia colectiva en desarrollo sostenible, seguridad energética y la salud y bienestar de los niños.
He aquí algunos ejemplos:
Acceder al agua dulce es fundamental para la vida, la salud y los medios de subsistencia. Se espera que el cambio climático ocasione más sequías, inundaciones y el aumento de los niveles del mar, lo que hará más difícil encontrar agua limpia y dulce.
La seguridad alimentaria se ve afectada por el cambio climático. Las sequías, las variaciones de la temperatura, los incendios forestales, los fenómenos meteorológicos extremos, las plagas, las enfermedades y las inundaciones pueden dañar los cultivos. El agravamiento del problema de la malnutrición pone en peligro la salud y la supervivencia de las mujeres y los niños, así como provoca más estrés en las personas con VIH que toman medicamentos antirretrovirales, dado que el consumo de alimentos sólidos es esencial para el éxito del tratamiento.
Una consecuencia clara del cambio climático es el desplazamiento y la migración de las familias, que casi siempre tiene un impacto negativo en los niños. En estas condiciones, crece el riesgo de que los niños sean víctimas de abusos y la trata de personas. Como consecuencia de los desastres, es posible que los niños abandonen la escuela y empiecen a trabajar para ayudar a sus familias a recuperarse.
Las enfermedades, como el paludismo, el dengue y la enfermedad de Lyme, que son transmitidas por insectos, también se deben a los cambios de temperatura porque los insectos son capaces de reproducirse en áreas donde antes no era posible. En la actualidad, se encuentran en muchos países del norte que solían ser demasiado fríos para su reproducción.
El aumento de la intensidad de los fenómenos meteorológicos extremos relacionados con el cambio climático también pone en peligro a las personas y, a menudo, destruye los lugares donde viven y trabajan. Además, ocasiona la destrucción de los cultivos, la contaminación de los recursos hídricos y la separación de las familias.
El humo y los vapores generados por la quema de combustibles fósiles en las viviendas, los autobuses, los automóviles y las fábricas aumentan las emisiones de gases de efecto invernadero, lo que agudiza el problema del cambio climático. A su vez, contaminan el aire que respiramos y causan problemas de salud.