Ayudar a los niños y niñas a crecer y prosperar

Los primeros ocho años de la vida de un niño o niña son de importancia fundamental. Determinan la salud, el crecimiento, el desarrollo y el logro en el aprendizaje de los niños y niñas en el futuro en la escuela, en la familia y comunidad, y en la vida en general.
Investigaciones recientes confirman que los primeros ocho años son particularmente importantes para el desarrollo del cerebro del niño, y los primeros tres años son los más críticos para conformar la arquitectura cerebral del niño.

¿Cuáles son algunas maneras de ayudar a un niño pequeño a desarrollarse bien?

1. Los años tempranos son muy importantes para el desarrollo cerebral. Todo lo que un niño o niña percibe ayuda a moldear al cerebro para pensar, sentir, moverse y aprender.

2. Los bebés aprenden rápidamente desde el momento en que nacen. Crecen y aprenden mejor cuando padres, madres y cuidadores que responden y se preocupan les brindan afecto, atención y estímulo, así como buena nutrición, atención en salud apropiada y protección.

3. Alentar a los niños y niñas a jugar y explorar les ayuda a desarrollarse social, emocional, física e intelectualmente. La exploración también ayuda a los niños y niñas a prepararse para la escuela.

4. Los niños y niñas aprenden cómo comportarse (social y emocionalmente) al imitar el comportamiento de quienes están más cercanos a ellos.

5. Comenzar la escuela a tiempo es crucial para la continuidad del desarrollo de un niño o una niña. El apoyo de los padres y madres, cuidadores, maestros y maestras y la comunidad es muy importante.

6. Los niños y niñas crecen y se desarrollan según patrones similares, pero cada niño o niña se desarrolla a su propio ritmo. Cada niña o niño tiene sus propios intereses, temperamento, estilo de interacción social y manera de abordar el aprendizaje.